Los rostros de los adoradores parecen transformados por el llamado esotérico a la posesión. El gong de los Atabales suena más fuerte. El olor a selva invade el lugar de culto. Crece el canto en lengua lucumí: “Siempre apostamos por programas de calidad con una oferta variada diseñada sobre todo https://conductordecamionensevill56789.widblog.com/85978823/details-fiction-and-ajiaco-y-bandeja-paisa-en-madrid